Foto de Joaquín Sarabia
Queridos obedecer siempre al corazón
Porque la razón
Tiene en cuenta razones que no son sentimientos
Y nosotros nos movemos por sentimientos.
Y los sentimientos anidan en el corazón
Y nuestra felicidad infelicidad habita en nuestros sentimientos.
Por éso hagamos caso al corazón
La razón no entiende de sentimientos
La razón no entiende de felicidad.
Y aunque el corazón se equivoque
Nosotros amamos nuestros sentimientos.
Por éso la felicidad no habita en lo razonable
La felicidad habita en lo loco.
La felicidad habita en el corazón
No en el cerebro.