La Condena

-Tú me pides que te abra mi corazón pero no sabes que me pides algo imposible para mí, vivo en mi mundo y no me atrevo a salir de mí mismo porque tengo miedo.

Es un miedo a lo desconocido, es un miedo a que el mundo exterior lance su agresividad contra mí y no puedo superarlo.

Por eso vivo en mi mundo, protegido por gruesas paredes y marcando los límites.

Me has conocido por Internet y debes saber que nunca podrás pasar ésa frontera, me conocerás de forma virtual y sólo aquello que yo sea capaz de mostrar.

Aquí en mi habitación se concentra mi vida y está toda la comunicación que puedo dar, ésos límites soy incapaz de rebasarlos.

Por eso hazte a la idea que estoy preso, que habito en una celda de una cárcel de la que de momento no puedo salir porque aún no he cumplido mi condena.

No puedo prometer nada para el futuro porque no tengo futuro fuera de ésta prisión.