-No creas que no sé por que has venido, y me parece normal tú visita, teniendo en cuenta la relación que hemos tenido, pero en éstos momentos creo que no es oportuna, por que nada queda de nuestra relación y los pocos lazos que nos unían quedaron rotos de la forma más cruel.
-No te falta razón, pero sabes tan bién como yo, que aunque ése lazo de nuestra unión ya no esté, ha sido lo suficientemente poderoso para que trate de encontrar junto a tí, los recuerdos y los sentimientos que ahora nos ahogan de forma despiadada, no tengo noche, no tengo día y al único lugar que puedo acudir es aquí, junto a tí.
-Parece mentira que durante tantos años hayamos permanecido unidos por él, que lo único que nos merecía la pena fuera él, y ahora que no está, necesitamos unirnos para llorar juntos.
-Parece que estando contigo él todavía está, que mientras hablamos mi mente cree que de un momento a otro saldrá de su habitación……..
-Los dos sabemos que nunca saldrá de su habitación, porque ya no está, se fué para no volver, y nos ha dejado tan sólos que su recuerdo tiene la suficiente fuerza como para juntarnos.
-Lo mejor que hicimos, y la desgracia nos lo ha quitado, tan joven, tan lleno de vida, no puedo hacerme a la idea, lo siento ¡no puedo!.
-Debemos asumir que nuestro hijo ha muerto.
-Tan joven……
-Tan joven, pero ha muerto.
-Dios mío, no lo aguantaré.
-No tenemos opción.
-Podemos seguir viéndonos en su memoria.
-Como quieras.
-Sí, lo quiero.
-Yo también.
Vaya que difícil debe ser esta situación, no tanto por la soledad, sino el dolor que debe dejar la ausencia permanente de un hijo… he sabido de personas que aun después de años siguieron sin poderlo superar. El querer seguir pensando que nada ha ocurrido es algo que regularmente ocurre, como relatas aquí…
Un gran abrazo amigo.
Creo que la ausencia de un hijo no se supera nunca, por éso la inclinación a no reconocerla.
Gracias Flori.
Un Fuerte Abrazo 🙂 .
Tremendìsimo Joaquìn,sobrevivir a un hijo es contranatura…..Si debe ser inefable el dolor por la pèrdida de unos padres,imagino, gracias a Dios no lo sè por experiencia y quiera EL,que tarde muchos años en enterarme,…….La ausencia para siempre de un hijo ,tiene que ser,una cruz viva y continua,un sinvivir perpetuo.
Besos
Es verdad Isabel, los hijos nacen para sobrevivir a los padres y su pérdida como muy bién dices es cotranatura, debe ser muy duro casi inaguantable.
Bienvenida a éste rincón, gracias por tu visita y comentario.
Un Abrazo Maribel 🙂 .
Horrible escena la que hoy nos planteas, querido amigo.
Un abrazo 🙂
La vida tiene de todo, cosas bellas y cosas horribles como ésta.
Un Abrazo, querida Adwoa 🙂 .
Cuando un hijo muere, el matrimonio se tambalea y con mucha frecuencia acaba rompiéndose. Se culpan el uno al otro. Siempre se buscan culpables por ese no aceptar la muerte, por no encontrarle sentido. Uno tiene una misión que cumplir y cuando concluye, tenga 7 o 77, se va. Así es.
En cualquier caso, humanamente resulta complicado sobrellevar la muerte de un hijo.
Debe ser una prueba tremenda la pérdida de un hijo, de todos modos imagino que cada pareja de padres reaccionará a su manera, no necesariamente culpándose, claro es sólo una opinión, seguramente si algo va mal, puede ser el detonante de la ruptura.
Gracias Zambullida.
Un Abrazo, Nuria 🙂 .
Es una de esas situaciones –la muerte de un hijo– cuyo dolor sólo cabe imaginarlo, porque vivir la experiencia ha de ser, a la fuerza, demoledor para cualquiera.
«Los dos sabemos que nunca saldrá de su habitación…» no debe de ser ni siquiera fácil decirlo…
Un saludo cordial.
Es verdad, debe ser lo peor que nos puede suceder a los humanos en general, un hijo nace para sobrevivir a los padres.
Gracias Alterfines, por tu visita y comentario.
Un Abrazo 🙂 .
Supongo que al menos de oídas conoceréis una serie llamada «Six Feet Under», grandísima, transcurre en una funeraria, por lo que la vida y la muerte son temas recurrentes, esta serie dio unas cuantas frases magistrales, dejo una, muy adecuada a la entrada:
“Cuando un niño pierde a sus padres, le llaman huérfano. Cuando un hombre o una mujer pierde a su cónyuge, le llaman viudo o viuda. Pero, ¿qué nombre recibe un padre cuando pierde a su hijo? Supongo que al ser una cosa tan terrible, nadie se ha atrevido a ponerle un nombre.”
Debe ser como dices por lo terrible que es perder aun hijo por lo que no se le ha puesto nombre.
Es curioso amigo, gracias por indicarlo tan oportunamente.
Un Abrazo, Dessjuest 🙂 .
No me imagino lo doloroso que debe ser perder un hijo, no me lo imagino, ni puedo, ni quiero imaginármelo, la sola idea de su ausencia me mata.
Un abrazo, querido Joaquín.
Asi es Mercedes, es mejor no pensarlo.
Un Abrazo, querida Mercedes 🙂 .
EL ALMA DESGARRADA SE EXPRESA DE ESA MANERA QUE LO HACES AMIGO JOAQUIN, NO SE SI ES FICCION O REALIDAD PERO EL TEXTO LO DICE TODO, RECIBE UN FUERTE ABRAZO
Afortunadamente no me ha pasado, y quiera Dios que no me pase nunca.
Gracias Lamberto.
Un fuerte Abrazo 🙂 .
Duro relato, difícil de leer por el tema aunque muy bien tratado.
Un abrazo.
Es verdad, es un tema difícil.
Gracias Dotdos, por tu visita y comentario.
Un Abrazo 🙂 .
Esto es algo antinatural. Que unos padres sobrevivan a sus hijos es la mayor aberración que hay, pero por desgracia ocurre, y yo conozco varios casos, y su vida ya no es misma. Besos
Ana
Para unos padres que pierdan algún hijo, es verdad que la vida ya nunca será igual.
Un Abrazo, Ana 😦 .